La Cancillería y el Servicio Diplomático enfrentan una grave crisis, manifestó el Embajador Guillermo Russo Checa.

Con cuarenta y seis años en el servicio exterior, en donde ocupó diversos puestos, como Embajador en Canadá, Panamá, Hungría, así como diferentes misiones diplomáticas en el extranjero, Russo Checa precisó su denuncia que, a su juicio, expresa malestar existente en Torre Tagle respecto a la forma como se ha conducido la institución diplomática en los últimos tiempos. «Se han vulnerado derechos sociales de Embajadores, reconocidos por la Constitución, y un reciente caso de espionaje con grabaciones ilícitas  revelan una línea contraria a la tradición republicana y democrática trazada por personalidades de nuestra institución de la talla de Raúl Porras Barrenechea, Carlos García Bedoya y Javier Pérez de Cuellar».

Según el Embajador Russo, la designación en el gobierno de PPK del Canciller Ricardo Luna, quien tuvo directa relación con el cese de 117 diplomáticos en 1992, repuso en Torre Tagle a un grupo de poder con vínculos políticos con el régimen de 1992-2000. Este grupo, integrado por los embajadores De Zela, Popolizio, Luna y Boza, ha formulado una estrategia de política exterior que ha fracasado con el Grupo de Lima, la migración venezolana, la fallida candidatura del Perú a la OEA, el papelón de la visita a España, tampoco define posiciones sobre la elección del Presidente del BID, ni orienta el debate nacional sobre ratificación del Tratado de Escazú, lo cual no tiene precedentes en la política exterior peruana.

Guillermo Russo Checa fue enfático al señalar que «hay responsables de la violación a los derechos sociales de los Embajadores, posibles delitos en el caso del Embajador Fortunato Quezada y la crisis de la política exterior del Perú que ameritan una severa investigación por el Congreso de la Republica y su Comisión de RREE». Agregó que el actual Vice Ministro de RREE Manuel Talavera «debe ser cesado en el cargo por ser el causante  -cuando fue Secretario General de Torre Tagle- de la medida arbitraria contra los embajadores, perjudicando a la institución. En el caso de los embajadores en UNESCO, Bolivia, Naciones Unidas y Washington, deben volver a Lima, mientras se investiga su responsabilidad penal, política y profesional, en la crisis de Torre Tagle».

Russo Checa saludó la posición del actual Canciller, Mario López, «quien no pertenece a este grupo de denunciados por un subalterno implicado en el complot. López ha procedido a ordenar la investigación, incluyendo a los ya citados embajadores, con fecha 2 de setiembre, antes que la denuncia fuera hecha pública. Además, el Canciller se ha comprometido a buscar una solución legal y justa al recorte de derechos de los embajadores cesados el 92».

Finalmente, hizo hincapié en que «hay una correlación entre la salud institucional de la Cancillería y la fortaleza o debilidad de la proyección internacional del Perú».  «Estamos ante una institución diplomática, que ha sido fundamental en la consolidación de la República desde nuestra independencia en 1821 y que tanto prestigio internacional ha ganado por su profesionalismo, no debe deteriorarse al haber sido tomada por una argolla de oportunistas, quienes manipulan a su antojo ascensos, asignaciones de puestos, premios y castigos”  puntualizó e hizo un llamado a la clase política a “no dejar a la buena de Dios la institucionalidad de Torre Tagle, pues al pueblo y a todos los poderes del Estado les concierne tener una diplomacia regida por el patriotismo, la ética y el profesionalismo, como instrumento fundamental para proyectar de manera eficaz al Perú en el sistema internacional”.

Una investigación interna de la Cancillería de la República realizada en el 2019 reveló que una cúpula al interior del cuerpo diplomático peruano realizó grabaciones encubiertas a sus embajadores que terminaron con la destitución del representante diplomático del Perú en Israel, Fortunato Quesada, el año 2018 cuando salieron a la opinión pública grabaciones en los que quedaron registrados malos tratos de parte del embajador hacia los trabajadores de la Embajada del Perú en Tel-Aviv.

VER NOTA DE PORTADA HISPANA 08/09/20 Diplomacia peruana: Grabaciones ocultas y “racismo

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