Milagros Alejandra Salinas Atencio

Presidente de Jóvenes del Milenio

Esta falacia la he escuchado en más de una conversación, por lo que es imperativo realizar este análisis, se sabe que en la lucha por la independencia hubo bastante participación femenina, pero vamos a centrarnos en la evolución de los derechos de participación política de las mujeres. Si bien el primer intento para que las mujeres puedan votar en Perú fue en 1867 cuando el senador Bambaren Ramírez propuso que ambos sexos fueran equiparados en derechos constitucionales8 no fue hasta el 17 de junio de 1956 que las mujeres peruanas pudimos ejercer nuestro voto en elecciones generales, según los estudios de Bareiro y Soto (2015) la conquista de los derechos de participación política de la mujer se divide en 3 periodos:

Primer período: El Sufragista (de 1929 a 1961) en este período América Latina reconoció el voto femenino, siendo Perú y Paraguay los dos últimos en lograrlo. Tras el discurso de María Jesús Alvarado en 1911 “El Feminismo” se marcó un antecedente histórico porque no quedó solo ahí, sino que en 1914 procedió a la fundación del Movimiento Feminista “Evolución Feminista” y en 1915 la de la Escuela-Taller Moral y Trabajo, donde María Jesús opinaba: “… que si continuaba ella sola la campaña de reivindicación de los derechos femeninos, la considerarían solamente personal -aunque sería arbitrario y absurdo este concepto- pero para evitarlo, decidió fundar una institución para darle carácter social irrefutable” (Castorino 1962:19) María Jesús fue la primera feminista en Perú, su movimiento tuvo cerca de 80 socias, entre sus principales aportes estuvo el ingreso de las mujeres a sociedades de beneficiencia, el análisis del Código Civil de 1851, el cual había preparado para la Comisión Reformadora en 1923 donde se solicitaban derechos civiles para el ejercicio de profesión.  Para 1932 Zoila Aurora Cáceres tuvo un papel fundamental en el primer debate parlamentario de la Asamblea Constituyente, como Magda Portal siendo militante Aprista escribiendo a favor del voto femenino en 1928, producto del primer debate parlamentario (1931 y 1932, fueron 7 sesiones donde se plantearon 3 posturas: la del Partido Descentralista en contra el sufragio femenino, el del APRA con el sufragio restringido o calificado y el de la Unión Revolucionaria con el voto irrestricto o amplio, mientras que el Partido Socialista estaba distribuido en las 3 posturas) como no se llegaba a un consenso, el Senador Manuel Arévalo presentó la opción de que las mujeres mayores a 20 años, las casadas o las que lo estuvieron y las madres de familia aún antes de los 20, puedan votar mientras sepan leer y escribir. Se aprobó el voto municipal y reconocimiento en la Constitución de 1933 bajo las condiciones de que sean mayores de 21 años, hacia 1936 el proyecto de Ley donde las mujeres obtenían su capacidad civil (sustentado en que ya ejercían profesiones liberales y diversos trabajos). También por primera vez las mujeres podían ejercer la administración de sus bienes, contratas, dejar de estar bajo la patria potestad del esposo este gran logro se debió también a María Jesús Alvarado y “Evolución Femenina”. Sin embargo las mujeres no pudieron ejercer su voto municipal hasta 1963 cuando se llevaron a cabo por primera vez las elecciones municipales directas en el gobierno de Fernando Belaunde Terry (antes de ello, el gobierno central designaba a los representantes). Precedente a esto, hubo un segundo debate parlamentario entre 1954 y 1955 sobre el derecho político (pero con las mismas restricciones del debate de 1933) Producto de este debate la Ley Nº 12391 de reforma Constitucional que constituía en la modificación de los artículos 84º, 86º y 88º. De acuerdo a esta modificación, las mujeres recibíamos “toda la amplitud de sus derechos ciudadanos al igual que el hombre” tal como escribió Odría. Siendo María Jesús Alvarado, Zoila Aurora Cáceres, Adela Montesinos, Elvira García y García y Magda Portal las primeras sufragistas mujeres peruanas12. En las elecciones de 1956 las mujeres votaron por primera vez, representando un tercio de los 1’575,741 electores inscritos13 (resáltese que tenían que estar casadas, tener más de 21 años y ser letradas, a diferencia de los hombres que no tenían los mismo requerimientos). En aquellas elecciones hubo participación como electoras, miembros de mesa y candidatas. El Presidente electo fue Manuel Prado Ugarteche y de 182 diputados, 8 fueron mujeres y de 53 senadores, solo Irene Silva de Santolalla fue Senadora. (Se presentaron 28 candidatas a Diputadas y 2 a Senadoras). Siendo el primer Parlamento de mujeres: Irene Silva de Santolalla, Lola Blanco de la Rosa Sánchez, Alicia Blanco de Montesinos, María Eleonora Silva y Silva, María M. Colina de Gotuzzo, Manuela C. Billinghurst López, Matilde Pérez Palacio Carranza, Juana M. Ubilluz de Palacios, Carlota Ramos de Santolaya14.

Segundo Período (de 1962 a 1990): En marzo de 1963, Ana Fernandini de Naranjo fue designada alcaldesa por el Ministro de Gobierno y Policía del Gobierno de Nicolás Lindley López, Germán Pagador Blondet. Fue la primera alcaldesa de Lima, se preocupó por la limpieza y el orden de la ciudad, su gobierno fue ultra conservador, entregó las llaves de la ciudad a la Virgen del Carmen, su discurso de alcaldesa fue: «No tenemos otra Ley que las sublimes enseñanzas del Evangelio que es el mejor código para regir los destinos de pueblos y naciones».15 Para diciembre de 1963 se suscitaron las primeras elecciones de alcaldía en Lima, siendo María Delgado de Odría la primera postulación con Alianza APRA- UNO contra Luis Bedoya Reyes, quien ganó las elecciones con 180 mil votos. Cuando en 1968 Velazco Alvarado dio el golpe de estado, el avance de derechos políticos de las mujeres se detuvo notoriamente, en 1975 las reservas del Banco Central estaban en negativo y el 29 de agosto el General Francisco Morales Bermúdez, entonces Presidente del Consejo de Ministros, lideró un golpe de estado desde la ciudad de Tacna y derrocó a Velasco en una acción que se conoció como el Tacnazo. Los primeros atentados terroristas inician en 1980, con el grupo “Sendero Luminoso”, con el incendio de las urnas electorales en Chuschi en las por las elecciones electorales de 1980 donde sale elegido Fernando Belaúnde Terry, tras ello, Ayacucho es considerado en estado de emergencia y puesto bajo disposición de las fuerzas militares, luego el MRTA aparece e inicia un periodo de inestabilidad política (terrorismo) en todo el país. En el terrorismo también hubo participación femenina tanto en las guerrillas como en el tema ideológico. Algunas mujeres políticas que destacaron en estos años fueron: Luisa María Cuculiza fue alcaldesa de Huánuco de 1975 a 1980, En 1989 fue elegida como Regidora de la Municipalidad Distrital de San Borja por el Partido Popular Cristiano, en alianza con FREDEMO. Por otro lado Gloria Helfer fue fundadora de Foro Educativo y miembro de su primer Consejo Directivo, Presidenta de Educación y Coordinadora del Plan de Gobierno de Izquierda Unida, comenzó a trabajar en el Ministerio de Educación en 1972, en 1984 María Elena Moyano fue designada presidenta de FEPOMUVES, cargo en la que fue reelegida en el año 1988, ella militaba en el Partido Unificado Mariateguista, en esa gestión (integrada en ese entonces por 105 presidentas de clubes de madres y 450 coordinadoras del Vaso de Leche) FEPOMUVES obtuvo la dirección del programa del Vaso de Leche (creado por Ley 24059)16. Para el año 1989, fue electa como teniente alcaldesa en la Municipalidad de Villa El Salvador, el 14 de febrero de 1992 Sendero Luminoso convocó un paro armado en todo el distrito de Villa El Salvador pero María Elena Moyano junto a varias mujeres desafiaron el paro saliendo a las calles, en respuesta a ello, al día siguiente, mientras iba a una pollada organizada por el Vaso de Leche fue asesinada por un comando aniquilamiento de 15 terroristas de Sendero Luminoso, luego la descuartizaron y colocaron una bomba en su tumba17. Entre 1980 y 1991 la población femenina graduada en carreras profesionales incrementó notablemente, por ejemplo en la Universidad Nacional Agraria La Molina, en veterinaria la proporción de mujeres pasó del 10% al 41%; en agronomía, del 5% al 23%; y en industrias alimentarias, del 42% al 61%. En cuanto a la Confederación de Campesinos del Perú en 1987 ya contaba con más de 50 mujeres en la primera Asamblea Nacional de la Mujer Campesina. En Puno se constituyeron asociaciones distritales de mujeres campesinas a partir de 1982. La organización de mujeres campesinas también llegó a Junín y Piura. En 1988 fue el Primer Encuentro de Mujeres Campesinas.18 Lourdes Flores Nano, fue elegida como regidora de Lima en 1986 y reelegida en 1989, luego de aspirar al puesto de Teniente Alcaldesa de Lima. Se convirtió en Diputada de la República en 1990, representando a Lima. 19 Hasta 1990 se presentó un estancamiento en el avance de los derechos de las mujeres en política peruana por la misma época de terrorismo, los golpes de estado entre otros, aquí comienza el tercer período.

Tercer período (de 1991 al 2011): Entre estos años se tuvieron avances sostenibles ya que se estableció la cuota de género a nivel nacional y subnacional, también se presentaron mecanismo de participación en las regiones. Para las elecciones municipales de 1993 Luisa María Cuculiza, fue elegida como Alcaldesa de San Borja, estuvo en el cargo desde 1994 hasta 1999, debido a que fue reelegida en 1995 y 1998. Entre sus labores destacadas estuvo el promover la creación de la primera Defensoría Municipal del Niño y del Adolescente (DEMUNA).20 Con el cierre del Parlamento de 1992, Flores es elegida miembro del Congreso Constituyente Democrático en 1993 y reelegida como Congresista de la República en 1995. Para 1995 se creó la Comisión de la Mujer en el Congreso de la República con Beatriz Merino como su primera presidenta. Para el 6 de enero de 1999, Alberto Fujimori (Presidente de 1995 al 2000) nombra a Luisa María Cuculiza como Ministra de Promoción de la Mujer y del Desarrollo Humano, cargo en el que permaneció hasta el 20 de noviembre del 2000, cuando cayó el régimen de Fujimori. En dicho cargo, implementó los Centros de Emergencia Mujer (CEM) y obtuvo por su labor el Premio Internacional de Alfabetización.21Para el 26 de julio de 1996, Martha Chávez Cossío se convirtió en la primera presidenta del Congreso de la República. Veinte años después fue elegida la última, Luz Salgado Rubianes, el 26 de julio del 2016.22 Lourdes Flores Nano se presenta como candidata a la Presidencia de la República en 2001, quedando en tercer lugar con un 24% de la votación nacional en la primera vuelta, detrás de Alejandro Toledo y Alan García, luego postula nuevamente en el 2006, siendo superada por Alan García y Ollanta Humala que pasaron a la segunda vuelta23. Fue candidata a la alcaldía de Lima en las elecciones municipales de Lima de 2010. Ganó Susana Villarán por muy pocos votos.24 En el año 2006 se constituyó la Mesa Parlamentaria de Mujeres, teniendo como primera presidenta a la congresista Rosario Sasieta. Este período presentó asociatividad entre autoridades locales, como asociaciones de regidoras y alcaldesas en varias zonas del país, producto de ello nace la Red Nacional de Autoridades Mujeres (RENAMA) cuya primera presidenta en el 2008 fue Nery Saldarriaga, ex titular del Gobierno Regional de Lambayeque.

“La mujer no participa porque no quiere”: Desde el 2011 hasta hoy hay un período de búsqueda de democracia paritaria sin acoso político, siendo el promedio de los últimos 19 años, unas 2500 autoridades mujeres electas25 por todo lo anteriormente narrado de la participación de las mujeres en política a nivel histórico se evidencia que la hipótesis de legalizar los derechos de participación política si fue efectivo, no es que las mujeres “no se interesaron”, es que no tenían la posibilidad legal y social para destacarse al igual que los hombres, los requisitos para que una mujer participe han sido más exigentes que a los hombres (desde los inicios debían estar casadas, ser letradas, tener mayor preparación educativa, por ende, el acceder a esta preparación exigía tácitamente posibilidades económicas para poder dedicarse a estudiar y no solo atender a la familia Históricamente si es demostrable esa brecha y poco reconocimiento a la labor política femenina, ahora ese 30% de cuota, que inicialmente fue un impulso, se vuelve un freno.

Dejar respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here