PORTADA HISPANA
En opinión del Dr. Hugo Alejandro Lozada Rocca, médico psiquiatra consultor en salud mental de la Asociación Pro Seguridad Ciudadana APROSEC, la elección de Pedro Castillo como presidente se puede explicar desde el problema de salud mental de un amplio sector de la población peruana socialmente abandonada por el centralismo y que se encuentra emocionalmente resentida.
¿Por qué el Perú es uno de los países con más problemas de salud mental?
Tenemos el primer lugar en depresión, el promedio a nivel mundial es de 15% de la población, el Perú tiene el 18%, lo mismo en cuanto pacientes neuro-psiquiátricos el promedio mundial es de 15% mientras el Perú tiene 18% también. Esto obedece a nuestro tipo de cultura: una mezcla de linajes raciales, entre la raza originaria, el español, el mestizo, el criollo, el afroperuano, etc. Cada grupo humano tiene su propia forma de abordar la vida. Si vamos a la historia podemos ver que desde este punto de vista la primera mezcla se da entre el elemento indio y el elemento español durante el Virreynato, de esta mezcla salió el criollo que dio paso a la República. Pero en épocas recientes tenemos la experiencia del terrorismo, que marcó fuertemente nuestra sociedad a punto de dividir nuestra historia en “antes del terrorismo” y “después del terrorismo”, que determinó que nuestra cultura sea muy servil por un lado, resentida también de una manera, pero sobre todo determinó el cómo nuestra cultura afronta los problemas de vida ante factores de vulneralidad. Y acá en el Perú tuvimos altos factores de vulnerabilidad, condición que dispara los índices de problemas en la salud mental de una sociedad.
Todos nosotros tenemos factores de protección y de vulnerabilidad. Lo que pasa es que los factores de vulnerabilidad son altos, como vivir sin condiciones de vida adecuadas, es un factor de vulnerabilidad; la ruptura del hogar familiar, también es un factor de vulnerabilidad. Así hay varios factores que coadyuvan a generar una población frágil que comienza a padecer problemas de salud mental, siendo la depresión y la ansiedad los problemas más preponderantes.
¿Afecta la polarización política en la salud mental de la población? ¿Cómo?
La polarización de todos estos años incluso anterior al terrorismo se basa en el centralismo, tenemos una capital en la que confluyen todas las posibilidades de desarrollo, fuera de Lima, el poblador es una persona abandonada, en las zonas rurales, lógicamente genera sentimientos de resentimiento y de resignación, que en el actual contexto político lo que hemos visto es una forma de protesta de personas que ven en el presidente Castillo a un campesino del Perú profundo que reivindica este malestar sin importar cuáles fueran sus propuestas, si son interesantes o no, sino que sencillamente el Presidente es alguien que representa ese “gran sufrimiento social” y se reivindican eligiéndolo para que lidere un cambio social. Lo cual es producto más de una urgencia que de una valoración objetiva de a quién estamos eligiendo para conducir los designios del Perú. Estamos viendo que la polarización es Lima vs Provincias y eso se ve más en la zona rural, donde no llegan ninguna de las mejoras del desarrollo social.
¿Por qué el resentimiento social afecta también la salud mental?
En realidad es un problema general de salud mental, no solamente en el trastorno duro de salud mental que son depresión, ansiedad, psicosis, sino de por sí tenemos una población que carece de las herramientas necesarias para afrontar estos momentos de oscilaciones emocionales. En la incertidumbre política por ejemplo, se están generando una serie de sentimientos encontrados en la población que están impactando negativamente en la salud mental de las personas. Esta incertidumbre política actual, no saber cuál va a ser el rumbo que va a tomar el gobierno sí genera una serie de problemas mentales en la población.
A pesar que el Perú ha crecido económicamente, también hemos crecido con una población abandonada y emocionalmente resentida y que justamente está reclamando hoy, y producto de esto es que este resentimiento ha llevado a una persona que nosotros sabemos que no es una persona capacitada para enarbolar este tipo de liderazgo político pero que nosotros decimos “bueno, lo ponemos porque nos representa” a pesar que esta representación es una representación del abandono. Eso es lo que está ocurriendo y sobre eso hay que trabajar, y cómo tenemos que trabajar: No polarizando a los peruanos. Los peruanos tenemos que unirnos, empezar a preocuparnos por las poblaciones en vulnerabilidad, y considerando a la salud mental como algo tan importante como a salud física. Tenemos una salud mental abandonada, creemos que la salud mental sólo se circunscribe a la psicosis, o a las depresiones, pero la salud es mucho más, salud mental son los factores que te hacen disfrutar de la vida, lo que nos hace sentir bien con nosotros mismos y nos hace sentir bien con los demás.
