PORTADA HISPANA.-

La crisis de la democracia peruana continúa sin solucionarse y amenaza con la salida  del 5to Presidente de la República desde el 2018 tras la renuncia de Pedro Pablo Kuczynski. De producirse la salida de Pedro Castillo, el Perú tendrá que nombrar al que sería el 6to presidente en 4 años. Esta profunda crisis de gobernabilidad que ataca al Perú se manifiesta en estos álgidos momentos como una pugna entre el Ejecutivo y la Fiscalía de la Nación.

Una grave y peligrosa grieta se abre en el Estado peruano: El enfrentamiento entre el gobierno de Pedro Castillo y la Fiscalía de la Nación es evidente y está alcanzando la máxima estridencia luego de la orden de detención preventiva dictada por la Fiscalía en contra de la cuñada del presidente Castillo, Yeniffer Paredes, quien tras haber estado 24 horas en condición de no habida por la justicia, se entregó personalmente a la Fiscalía este miércoles 10 acompañada por las Rondas Campesinas previamente convocadas por el presidente Pedro Castillo con quien se habían reunido en el Palacio de Gobierno horas antes.

Tras conocerse la orden de captura de Yeniffer Paredes y producirse el insólito allanamiento de la residencia presidencial en el Palacio de Gobierno por los peritos fiscales, el presidente Castillo pronunció un Mensaje a la Nación en el que responsabilizó a la Fiscalía de la Nación de ser parte de “un plan en su contra” que tiene por objetivo vacarlo de su cargo presidencial, declaraciones que fueron rechazadas por la Fiscal de la Nación, Patricia Benavides, quien manifestó que las acciones de la Fiscalía no obedecen a razones políticas, sino al cumplimiento de la ley. En conferencia de prensa, la Fiscal de la Nación afirmó que su responsabilidad constitucional es perseguir el delito “caiga quien caiga y pese a quien le pese”.

Por su parte, Pedro Castillo criticó que la Fiscal de la Nación, Patricia Benavides haya ordenado la desactivación de la Fiscalía Especial encargada de investigar el caso de los “Cuellos Blancos”, y que se haya cambiado a la fiscal que investigaba a la hermana de la Fiscal de la Nación.

Con la orden de captura de la cuñada del presidente Pedro Castillo se sigue cerrando el cerco fiscal tendido alrededor de la familia cercana al Presidente, en el que están implicados la Primera Dama, Lilia Paredes, sus hermanos  Walter y David, y su hermana Yeniffer Paredes, por el delito de tráfico de influencias. A ellos se suman el ex asesor del Palacio de Gobierno, Bruno Pacheco, y el ex ministro de Salud, Juan Silva, quien se encuentra prófugo, entre otros personajes seriamente comprometidos  que ya colaboran con la justicia como Samir Villaverde y Karelym López.

En este contexto, el gobierno de Pedro Castillo sufrió un duro golpe este miércoles 10 al recibir la noticia de la renuncia de los embajadores del Perú en la OEA y la ONU, Harold Forsyth y Manuel Rodríguez Cuadros.

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