Miércoles 7 de diciembre, minutos antes del mediodía, un tembloroso Pedro Castillo Terrones sostiene a duras penas el papel que contiene lo que sería el inicio del fin de su gestión como presidente de la república. Arrogándose un poder que constitucionalmente no tenía, relató que había decidido disolver el Congreso y declarar un “gobierno de excepción”.
El anuncio se dio cuando el Parlamento se preparaba para debatir un tercer intento de juicio político en su contra. Lo pensaban vacar y se adelantó a los hechos.
“Se dictan las siguientes medidas: disolver temporalmente el Congreso de la República e instaurar un gobierno de emergencia excepcional. Se convocarán elecciones para un nuevo Congreso con facultades constituyentes para elaborar una nueva Constitución con un plazo no mayor de 9 meses”, expuso Castillo en su mensaje a la nación.
Se derrumbó el castillo
Castillo llevaba 16 meses en el poder y era evidente que su desconocimiento de la materia estaba llevando al Perú al despeñadero, su vacancia era cuestión de tiempo y quizá a eso se debió su intento desesperado de perpetrar una afrenta al Estado de derecho en el Perú. Aconsejado por la ignorancia, tomó una decisión que lo llevó a cavar su propia tumba, terminó preso y hoy duerme en una fría cama en el penal Barbadillo.
Al cumplirse el primer año de la intentona golpista de Castillo, el abogado constitucionalista Aníbal Quiroga señaló: “Fue un golpe de Estado histórico para el Perú, porque el anterior había ocurrido en el siglo pasado, en el año 1992 y 30 años después se intentó hacer lo mismo de manera absurda que va contra la Constitución. Yo creo que el señor (Pedro) Castillo y el señor (Aníbal) Torres se quedaron colgados en el tiempo y por tanto se produjo la vacancia por causal de flagrancia y la sucesión presidencial siguiendo lo que dice nuestra Carta Magna”.
¿Los cómplices?
“Si quieren hacerme presidenciable, ya saben adónde mandarme”. Con esta frase, de fines de marzo, Betssy Chávez, la presidenta del último Consejo de Ministros de Pedro Castillo se mostró desafiante ante sus opositores y lanzó una evidente provocación. Frente las cámaras de un programa dominical, la expremier intentó dejar en claro que para ella ingresar a prisión no le quitaba el sueño y hasta se comparó con líderes políticos que pasaron por una cárcel.
“No le tengo miedo. Nelson Mandela estuvo 30 años en prisión, el presidente más exitoso y trascendente de Sudáfrica. (José) Mujica estuvo en prisión, líder mundial de izquierda uruguayo. (Gustavo) Petro también”, enumeró.
Chávez Chino es sindicada como una de las “ideadoras” del intento golpista del 7 de diciembre del año pasado. Por ello, la Corte Suprema declaró fundado el recurso de apelación de la Fiscalía y ordenó la captura de la expresidenta de la PCM que ahora es investigada por los presuntos delitos de rebelión y conspiración contra el Estado.
En junio este año, Bettsy Chávez fue detenida y abandonó presurosa y con la sonrisa nerviosa, la vivienda de sus abuelos, en el distrito de Gregorio Albarracín, en Tacna.
Una orden judicial del magistrado César San Martín acababa de revocar su privilegiada comparecencia restringida por una prisión preventiva, disponiendo, además, su pronta captura. Luego, en agosto, la ex mano derecha de Castillo pidió entre sollozos que le permitan llevar el proceso en libertad.
El otro sospechoso de conocer los detalles del mensaje a la Nación que dio Castillo es Aníbal Torres, su expremier y abogado quien hace poco dio su versión de los hechos en un programa de televisión. Contó que momentos después del anuncio que rompió con el orden constitucional, le consultó sobre el apoyo de las FF. AA.
“Al terminar el mensaje manifiesta que va a cerrar el Congreso y otras instituciones, me acerqué y le pregunté, ‘¿has coordinado con las Fuerzas Armadas o con la Policía Nacional?’, y contestó: ‘No se preocupe, doctor’; ya con esa respuesta, la duda en mí aumentó”, narró.
“Boluarte debe seguir”
La teoría dice que un golpe de Estado –como el que intentó Castillo Terrones hace exactamente un años– lo da un autócrata, un personaje que no cree en la Constitución de un país y que considera que tiene derecho a gobernar por encima de las leyes y la propia democracia.
Aquel miércoles, un mal asesorado Castillo se disparó a los pies y acabó abruptamente con su nefasto gobierno para dar paso a la gestión de Dina Boluarte que, pese a sus vaivenes, se sostiene en Palacio pese a las críticas.
Para el doctor Aníbal Quiroga, la mandataria debería seguir en el cargo hasta finalizar su gestión en 2026.
“Ha sido un año difícil para Boluarte porque el presidente necesita tener el apoyo del Congreso, pero en este caso la mayoría congresal que respaldaba a Castillo no lo está haciendo con la actual mandataria. Encima enfrentó una ola de violencia que trajo mucho caos y mucha afectación económica para el país, eventos que la llevaron a sugerir un adelanto de elecciones. No me parece que la presidenta sea una persona débil, pero ha tenido un año complicado y esperemos que cumpla su mandato hasta julio del 2026 porque su éxito significará el éxito para el país. Los más interesados en adelantar las elecciones son los de izquierda para justamente mantener su espacio”.
Día de la Democracia
En tanto, el Gobierno declaró el 7 de diciembre como “Día de la Institucionalidad, del Estado de Derecho y de la Defensa de la Democracia”.
Esta medida busca fomentar “los valores democráticos e institucionales entre la ciudadanía”, promoviendo “la conciencia colectiva sobre el respeto al Estado Constitucional y Democrático de Derecho en el Perú”, según se lee en el diario oficial El Peruano.
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