POR JULIO HERRERA
Rómulo Mucho Mamani, empresario proveedor de servicios del sector minero, director de Proemprender, ex Congresista de la República, ha sido viceministro de minas, periodo 2005-2006. En su opinión, solo la educación puede sacar al Perú del subdesarrollo, por lo que propone dedicar el 8 % del PBI a ese Sector. Actualmente, el sector educación en el Perú tiene el 4.5 % del PBI, mientras que los países desarrollados le asignan más del 6 % de su PBI.
¿Cómo está la economía nacional al finalizar este 2020?
Vivimos tiempos difíciles pero ni el Gobierno ni los economistas sienten o quieren ver la verdadera trascendencia que tiene la caída abrupta de la economía a causa de la pandemia del Covid-19. Según el BCR será un -12%, según en el Ministerio de Economía será -12.7%. Para algunos puede llegar a una caída de -15%. Esta generación no ha vivido nada parecido. Es momento de ser inteligentes para salir de esta crisis, sin embargo en el país se está cometiendo el error de mezclar economía con política cuando nos encontramos en una polarización social y política que nos conduce a una inestabilidad y una ingobernabilidad. Eso de ninguna manera nos ayuda a lograr una recuperación económica requerida, por lo contrario, incrementa la incertidumbre.
¿No ha habido un buen manejo de la macroeconomía nacional durante la pandemia?
Para el 2019 se proyectó que el Perú crecería 4%, pero en realidad llegó a crecer en 2.16%. Para el 2020 nuevamente se proyectó un crecimiento de 4%; en enero del 2020 crecimos 3%, en febrero 4%, pero en marzo con la cuarentena caímos en -17% para en abril caer en -40.5% ¡La caída más dramática de la economía de un país en el mundo entero! Ninguna economía de otro país cayó tanto como la peruana. Los responsables son las autoridades gubernamentales. Vizcarra paralizó casi toda la economía excepto servicios de alimentación y médicos, eso no era necesario. Nadie ha advertido ese detalle que resulta fundamental para explicar por qué cayó tanto nuestra economía. La economía hizo un paro total de golpe, se paralizó el sector minero, el más importante sector de nuestra economía. Si nos fijamos por ejemplo, Chile no paralizó la extracción minera, Perú paralizó un 90% de la producción. Sabemos que las minas se encuentran en lugares alejados y aislados, además son zonas en donde desde antes de la pandemia se aplican las más estrictas medidas de seguridad.
Por otro lado, también es de conocimiento general que el 72% de nuestra fuerza laboral es informal porque vive del día a día, sin capacidad para el ahorro y fuera del sistema financiero. Entonces, era lógico que la población pensaba en “Mas le tenemos miedo al hambre que al Covid”. Vizcarra no tomó las decisiones más adecuadas, los resultados de la gestión en salud y la economía son conocidos. Las cifras hablan por sí solas. El Perú llegó a alcanzar el primer lugar en el mundo en mayor cantidad de infectados y fallecidos por Covid, 30,500 y 1,150 por cada millón de habitantes respectivamente.
¿Por qué se cometieron todos estos errores en el manejo de la crisis por la pandemia?
La razón de este mal manejo del gobierno, es que Vizcarra ni su equipo que lo acompaña no conocen el país, tampoco conocen la industria minera ni el sector salud. Por la misma razón el Perú no tiene firmado todavía ningún contrato con ningún laboratorio para adquirir la vacuna. Fue un gobierno de improvisación, sin planes ni estrategia para enfrentar la pandemia, bien decía el New York Times que la ineficiencia y la corrupción no había permitido enfrentar adecuadamente la pandemia. El confinamiento causó la paralización de las obras públicas, las inversiones privadas, congelando las divisas y devaluando la moneda nacional que ha perdido valor con respecto al dólar americano subiendo la tasa de cambio a 3.62 soles por dólar. La recaudación tributaria ha disminuido y en consecuencia el gobierno ha tenido que empezar a endeudarse del sistema financiero internacional. El Perú gozaba de buenos indicadores económicos, estábamos bien vistos por la comunidad financiera internacional. Ahora que han empezado a endeudarse porque se gastaron los ahorros, se repartió a diestra y siniestra, los bonos universales, a los gobiernos locales, gobiernos regionales, ministerios, etc. Se entiende que el asistencialismo social en tiempos de crisis es muy importante, pero creo que Vizcarra no tuvo la mejor estrategia, el reparto de bonos fue un caos, la apertura de los mercados, donde aumentaron los casos de infectados. No se supo utilizar a las FFAA que están precisamente preparados para estas situaciones, solo se les confió el orden y la seguridad ciudadana como apoyo a la Policía Nacional, las FFAA tienen la capacidad logística para el reparto de alimentos y medicinas, etc. Como consecuencia de todas estas fallas, tenemos como resultado: Perú el país con las cifras más altas de víctimas del Covid por cada millón de habitantes. Otro tema muy importante es contar con el Instituto Nacional de Planificación que fue desactivado por el gobierno de Fujimori. No tenemos un plan para el Perú a largo plazo, lo rescatable del gobierno de Vizcarra junto al BCR es el plan “Reactiva Perú”, que es un préstamo a una baja tasa de interés para empresas pequeñas a grandes para que no quiebren.
¿Cuáles son las soluciones para esta crisis en el Perú?
Necesitamos en primer lugar no descuidar el control estricto de la pandemia, prevenir para la llegada de la segunda ola. En segundo lugar se debe dar un fuerte impulso a la ejecución de grandes proyectos de inversión en infraestructura: Tenemos paralizados una cartera de 110 mil millones de dólares en proyectos para los próximos 10 años en proyectos de transporte, energía, puertos, aeropuertos, irrigaciones, etc., también tenemos una cartera de 46 mil millones en 47 proyectos mineros. Es decir, tenemos condiciones para recuperarnos y retomar la senda del crecimiento para resolver los problemas estructurales que tiene nuestro país. En tercer lugar necesitamos poner fin a la polarización y fraccionamiento político y darle predictibilidad a nuestra democracia.
